martes, 9 de diciembre de 2008

Objetivos y Justificación

OBJETIVOS
  • Dar a conocer el origen de la música andina, su historia y sus principales características.

  • Conocer los diversos instrumentos que hacen parte de este género musical.

  • Aprender sobre los ritmos y bailes andinos de cada país: Colombia, Ecuador, Bolivia, Perú, Chile y Argentina.

JUSTIFICACIÓN

A través de su paso por el mundo, el hombre ha desarrollado una personalidad creativa caracterizada por múltiples factores que le identifican de las otras especies. Siempre ha estado en busca de conocimiento sobre los asuntos que le rodean con el fin de conocerlos y asemejarlos a su entorno. En su búsqueda de porqués se ha encontrado de frente con elementos que empleaba para distraerse. Esta personalidad creativa e investigativa no sólo lo ha llevado a desarrollar elementos para su uso diario, elementos útiles para actividades básicas: como alimentarse, cazar, cosechar. Sino también ha facilitado el desarrollo de su lado creativo, característica esencial del homo sapiens.

Esta personalidad creativa e investigativa no sólo lo ha llevado a desarrollar elementos para su uso diario, elementos útiles para actividades básicas: como alimentarse, cazar, cosechar. Sino también ha facilitado el desarrollo de su lado creativo, característica esencial del homo sapiens.

En el proceso de surgir, consecuencia directa de su personalidad creativa, el hombre se fue reuniendo con otros, formando de ésta manera regiones y grupos culturales diferentes. La música ha aparecido como medio de expresión para comunicar sentimientos. Por ejemplo las necesidades eran expresadas al dios respectivo con cánticos, pidiéndole que lloviera, que la cosecha mejorara, que los hijos crecieran y un sin fin de peticiones que manifestaba con bailes, canciones… con música.


La religión es tan solo un ejemplo de la manera que el arte, más precisamente la música, hizo su aparición en la vida del hombre. La música es una manera para expresar cualquier tipo de sentimiento y de identificar a una sociedad. Luego es de vital importancia identificar los gustos musicales de una sociedad ya que éstos dicen muchas cosas sobre la misma.

La música andina es conocida mundialmente por sus instrumentos exóticos y los ritmos trascendentales que transportan al oyente a un estado de evocación. Detrás de este tipo de música hay un sinnúmero de eventos ocurridos en la historia de los países andinos que conllevaron al desarrollo de este género musical. Será un trabajo arduo determinar éstos eventos y la relación que tienen con el desarrollo artístico de todo un continente.

Plan de Lectura

Plan de Lectura

Lectura 1

El lector deberá:
  1. Mencionar las principales características de la música andina que considere importantes.
  2. Realizar un cuadro comparativo de las categorías de la música andina mencionadas en la lectura

Lectura 2

El lector deberá:

  1. Buscar e identificar el sonido de los instrumentos que mas le llamaron la atención.

Lectura 3

El lector deberá:

  1. Buscar en Internet ritmos y danzas andinas de Colombia y realizar una descripción de lo que encontró.

Lectura 4

El lector deberá:

  1. ¿Quiénes fueron Víctor Jara y Violeta Parra y que papel jugaron dentro de la canción social?


Lectura 5

El lector deberá:

  1. ¿Qué es el Inti Raymi?


Lectura 6

El lector deberá:

  1. Realizar un cuadro comparativo entre los tres grupos andinos mencionados.

viernes, 5 de diciembre de 2008

Lectura 6

Música Andina
Objetivos:
  • Reconocer a algunos de los más importantes grupos de música andina.
  • Comparar los grupos para determinar las diferencias entre este en género en Bolivia, Perú y Chile.
Grupos Andinos


Illapu




ver: http://www.illapu.cl/
http://es.wikipedia.org/wiki/Illapu


Kjarkas



ver: http://www.loskjarkas.com/
http://es.wikipedia.org/wiki/Los_Kjarkas


Alborada



ver: http://es.wikipedia.org/wiki/Alborada_(Per%C3%BA)

Lectura 5

Objetivos:
  • Conocer las características de algunas danzas típicas en el género
  • Reconocer los diferentes términos empleados
Auqui-auqui



ORIGEN:
Se pierde en la noche de los tiempos entre las comunidades aymaras. Igualmente se dice bailara en honor al inca.
SIGNIFICADO:
En una primera época era signo de respeto al anciano; la joroba parece simbolizar una carga en señal de sumisión. Posteriormente se adoptaron los atuendos castellanos para burlarse de los conquistadores.
COMPONENTES:
Todos hombres.
DESCRIPCIÓN:
Bailan agachados con una mano en la cadera derecha simulando achaques, y la otra agarrando un bastón muy retorcido con el cuál golpean el suelo al compás de la música profiriendo gritos intermitentes. En las plazas ejecutan evoluciones y rodean a los músicos.
FIESTAS:
En homenaje a santos masculinos (San Pedro, San Andrés, San Antonio, etc.).
INSTRUMENTOS:
Pinquillos.
NOTAS:
También se conoce como Achachi-kumu en la zona aymara, y Machu-tusoq en la quechua. Los atuendos son muy toscos con telas autóctonas y las barbas son de un vegetal llamado qaqa sunkha. Una evolución posterior o paralela puede estar relacionada con la danza Doctorcito.



Callahuaya

ORIGEN:
Los Qollahuayos fueron conocidos como médicos, curanderos, farmacéuticos, tal como lo indica su nombre: "el que lleva medicinas", y eran gente muy particular pues no sólo por lo extravagante de su vestimenta, sino también porque eran muy cultos, dominando varios idiomas, y muy recelosos de sus conocimientos, hasta tal punto de hablar diferentes lenguas entre ellos para que los demás no entendieses lo que estaban tratando en esos momentos. En general solitarios se dice vinieran del Beni, tras el Sorata, del Illimani o del Illampu. Fueron muy respetados por su sabiduría farmacológica y médica, a tal punto inspiraron leyendas y la danza en cuestión.
SIGNIFICADO:
Es un homenaje a estos personajes, ya míticos, que hacían de puente entre lo místico y lo terrenal a través de sus hierbas y conocimientos.
COMPONENTES:
En el ámbito rural sólo hombres, mientras que en las ciudades van acompañados de mujeres.
DESCRIPCIÓN:
En filas emparejadas avanzan para luego formar círculos mixtos, siempre haciendo evoluciones con los vistosos paraguas.
FIESTAS:
Fiestas patronales.
INSTRUMENTOS:
Pinquillos y en los últimos tiempos Banda de Metales.
NOTAS:
Como muchas otras danzas, está organizada a través del Cargo, que es nombrado por el párroco, y con la ayuda de personas entendidas, Yanapa, ordena los ensayos. Luego la comunidad contribuye con comidas y bebidas para los danzantes, conocidas como Apqata y Jaljata, respectivamente

Lectura 4

Personajes
Objetivos:
  • Reconocer los diferentes personajes que representan la música andina.
Personajes


























Lectura 3

Ritmos y Danzas Andinas
Objetivos:
  • Mostrar los diferentes tipos de danzas y sus características.
  • Explicar el significado cultural que tienen las danzas señaladas.
Ritmos y Danzas Andinas

En este campo tenemos todas las formas de música conocidas como folklórica: el taquirari, la cueca, la morenada, el huayño o huayno, el huaylas, la saya, el tinku, el chuntunqui, el sanjuanito y existen infinidad de estilos que persisten y son creados por los músicos.

El Chuntunqui por ejemplo, es un villancico antiguo de las navidades rurales, y que en la actualidad ha sido incorporado al neo-folklore, incorporándole letras de canciones románticas. Actualmente es uno de los ritmos más importantes del neo-folklore boliviano.
El taquirari es el ritmo musical y el baile mas característico de Santa Cruz, Beni y Pando de Bolivia. Se cree que su nombre proviene de la palabra maxeña takirikire que significa flecha. Para bailar taquirari, la pareja debe estar frente a frente y con as manos agarradas y se dan saltos que van marcados por la música.

La cueca es un baile de pareja suelta, en el que se representa el asedio amoroso de una mujer por un hombre. Los bailarines, que llevan un pañuelo en la mano derecha, trazan figuras circulares, con vueltas y medias vueltas, interrumpidas por diversos floreos. Es la danza nacional oficial de Chile y bailada en el oeste de América del Sur, desde Bolivia, como danza típica, hasta Argentina y Colombia, teniendo distintas variedades según las regiones y las épocas.

La Morenada es una danza cuyos orígenes se remontan a los tiempos de la colonización española, ésta danza es una sátira, característica de algunas danzas andinas, creada con el objetivo de censurar, criticar y ridiculizar, en este caso, los sufrimientos de la población negra que llega al altiplano.

El huayno o huayño (quechua: wayñu), es un importante género de baile y música andino de origen precolombino y actualmente muy difundido entre los pueblos andinos. Adopta diversas modalidades, según las tradiciones locales o regionales; y en cierta forma representa la adhesión popular a la cultura del terruño. Es considerado el baile andino por excelencia.
El
hombre ofrece el brazo derecho para invitar a bailar, o pone su pañuelo sobre el hombro de la mujer; luego se efectúa el paseo de las parejas por el recinto; y finalmente el baile, que consiste en un zapateo ágil y vigoroso durante el cual asedia el hombre a la mujer, frente a frente, tocándola con sus hombros al girar, y sólo ocasionalmente enlaza su brazo derecho al izquierdo de su pareja en tanto que ambos evolucionan al ritmo de la música. Sus movimientos son alegres y picarescos.
Su estructura musical surge de una base pentatónica de ritmo binario, característica estructural que ha permitido a este género convertirse en la base de una serie de ritmos híbridos, desde la
chicha hasta el rock andino.
En algunas variantes del huaino intervienen bandas típicas, que añaden instrumentos como las
trompetas, el saxofón y el acordeón. Por otro lado, aunque son géneros muy diferentes, en la sensibilidad popular el huaino está más vinculado a la marinera de lo que aparenta, como lo recuerda este estribillo de marinera serrana: "no hay marinera sin huayno / ni huayno sin marinera / cholita pollera verde / para ti va la tercera".
El Huaylas o Huaylarsh (en
quechua: waylars = festividad; en aymara: waylarsh = juventud) es un género de baile y música andino peruano de origen precolombino.
Es muy conocido y difundido en todo el
Valle del Mantaro, aunque ha sufrido muchas modificaciones al salir de su contexto rural para convertirse en espectáculo; entre los departamentos de Junín y Huancavelica, en los pueblos de Pilcomayo, Cochas, Huancayo, Chilca, Azapampa, La Puntá, Viques, Huacrapuquio, Huayucachi, Sapallanga, Huancán, Chupuro, Chongos y Pucará.
La Saya comprende un estilo de música y danza que puede ser considerado como el producto de la hibridez de elementos africanos, aymaras y españoles. El acompañamiento de tambores y las coplas entre solista y coro surgen de las raíces africanas, el vestuario adoptado por las mujeres se asemeja al traje de las mujeres aymaras. El canto es ejecutado en castellano. Antiguamente las dos filas de bailarines eran guiadas por los mayores del pueblo. El Capitán de baile hacía orden y lugar para los bailarines con el chicote, los dos Caporales con los pequeños cascabeles ajustados a las pantorrillas marcaban el ritmo siguiendo al tambor mayor. Hasta la época de la Reforma Agraria se ejecutaba la Saya “sólo en fiestas patronales con previa autorización del patrón”, luego se la bailaba en todos los acontecimientos sociales. La fuerte jerarquización del baile predominante hasta los años 1960 ya no existe más. Tampoco existen más los antes usuales personajes del baile como el Mayor de Plaza, el Alcalde y el Rey. Según Templeman esta Saya “antigua” dejó de ser ejecutada en parte por las ridiculizaciones hacia los negros en danzas como el Tundiqui o los Negritos, que hicieron que los propios afro-bolivianos se averguenzen de su tradición musical y dejaran en suspenso todas las representaciones de la Saya.

El Tinku no es una danza cómo erróneamente se cree. Es un enfrentamiento de carácter ritual que se realiza en las poblaciones del Norte de Potosí Bolivia. El significado de la palabra Tinku es "encuentro" (de la palabra quechua tinkuy, encontrarse). En los últimos años también ha sufrido una tergiversación al ser presentada como una danza folclórica, que rápidamente se hizo muy popular, especialmente en las ciudades y que cada vez se aleja más del origen y significado propio. Éste ritual es todavía practicado en las comunidades de la región denominada Norte Potosí, siendo conservado y transmitido de una generación a la otra, para promover parte de la costumbre ancestral y del patrimonio cultural. El tinku es originario de los Laimes y Jucumanis, situados al norte del departamento de Potosí. En este encuentro ritual, que se realiza anualmente denominado Tinku, se efectúan peleas entre los varones (pero también entre mujeres y niños) de las comunidades de abajo y de arriba. Generalmente las peleas deben ser uno contra uno, pero muchas veces el excesivo consumo de chicha lleva a peleas, las que pueden causar graves heridas e incluso la muerte.

El sanjuanito es un género musical ecuatoriano de música andina. Muy popular a inicios del siglo XX, es un género originario de la provincia de Imbabura.
A diferencia del pasillo es un género alegre y bailable que se ejecuta en las festividades de la cultura mestiza e indígena en Ecuador. Su molde sirvió de base para que muchos villancicos se adaptaran a su ritmo. el sanjuanito tiene origen prehispánico, destacando aquí un grado de influencia incaica traída desde Perú durante la expansión del Tahuantinsuyo.
Las primeras muestras conocidas de este ritmo fueron interpretadas por el artista ecuatoriano Juan Agustín Guerrero Toro, las cuales se publicaron en 1883.
También, hay diversas formas tradicionales de danza y música andina que practican las poblaciones indígenas de cada país. Algunos de los ejemplos más famosos son el huayno y la danza del cóndor en Perú, el sanjuanito y el danzante de Ecuador, las kullaguas del altiplano boliviano y los carnavalitos bolivianos, chilenos y argentinos. La música andina es también un elemento fundamental de numerosas celebraciones y festivales, como es el caso del famoso carnaval de Oruro, en Bolivia. Todos estos ritmos continúan inspirando y produciendo formas modernas que mezclan lo tradicional con lo moderno. Artistas 'pop' como Shakira y Carlos Vives, salseros como Rubén Blades, y creadores de música electrónica tipo 'Trance' como Mikie González, incorporan en algunas de sus obras la riqueza instrumental y rítmica de la música andina.

Lectura 2 (Parte IV)

Percusión


Bombo


Son muchos los tipos de bombo existentes dentro del folklore andino y en cada región reciben distintos nombres, formas y tamaños. De esta manera podemos encontrarnos cajas chayeras o tinyas en Bolivia (con cilindros de poca altura y en ocasiones un gran diámetro) o Bombos de cilindro alto en Argentina donde existen también variantes típicas de cada región concreta. Dignos de mención por su calidad son los bombos Salteños y los Santiagueños y por supuesto el bombo legüero de gran tamaño y que recibe su nombre por su potente y grave sonido, capaz de oírse a una legua de distancia. Generalmente se fabrican en madera de troncos ahuecados y sus parches de piel de cabrito o de oveja que son tensados mediante cuerda o cinta de cuero que las tensa en zig-zag desde los aros. Son percutidos con baquetas que en ocasiones van revestidas del mismo cuero y reciben el nombre de mazas. Excavaciones recientes, revelan la existencia de alguno de estos bombos en culturas preincaicas.



Chajchas


Las Chajchas son instrumentos de percusión muy habituales en el folklore Andino. Se suelen tocar por pares y se construyen a partir de pezuñas de animales (habitualmente de cabrito, oveja, llama o alpaca) que se enzarzan en manojos cosidas en un trozo de tira de tela.
Se tocan a modo de sonajas, haciéndolas chasquear unas contra otras lo que provoca un sonido muy particular.
Son empleadas en numerosos bailes y ceremonias como acompañamiento rítmico de las bandas andinas y su existencia se remonta a culturas preincaicas.






Maracas

Es un instrumento muy extendido por todo el cono Sur en muy distintas formas y tamaños dependiendo de la región.
Se fabrican a partir de distintos tipos de calabazas que se ahuecan y se dejan secar introduciendo en su interior semillas. Se tocan a modo de sonaja haciendo chasquear su contenido con las paredes del instrumento. Por lo general se emplean en parejas, diferenciando el macho (de sonido más grave) de la hembra (con sonido mas agudo). Esto se logra adecuando la cantidad de semillas de su interior o bien variando el tamaño de la calabaza. En ocasiones se emplea una sola calabaza de gran tamaño y forma de pera recubierta por una malla de pequeños caracolillos que responde al movimiento del instrumento chasqueando contra sus paredes.



Cajón

El Cajón Peruano, es una caja de madera con un orificio en el centro; Se dice también que las "calabazas" o "chacombos" fueron empleados simultáneamente en los orígenes del cajón. En efecto, los pocos cronistas que han escrito acerca de la música peruana en tiempos de La fiesta de Amancayes, hablan de tambores, vihuelas y guitarras, e inclusive de "calabazas", pero aún no mencionaban al cajón. En esas épocas, existían variedades de ingeniosos instrumentos con los cuales el músico se acompañaba, había "tamboretes" que utilizaban un pedazo cuadrado de madera cepillada, sobre cuatro soportes, y también los llamados tambores.
Estos eran hechos de troncos de árboles huecos y cortados de diferentes alturas, que se pulían y cubrían en uno y otro extremo, con piel de animales. Pancho Fierro en sus grabados costumbristas acerca de la zamacueca, y el lundero o landó, no representa ningún instrumento de percusión en esas épocas, por lo cual se presume que el uso del cajón se generaliza años más tarde.
Cuando hay más de un cajón, uno de ellos llevará la base rítmica, mientras que el otro adornara con matices sonoros, lo cual se denomina "florear". También se puede encontrar formas de contrapunto entre dos cajones, entrando en un diálogo de percusión, mientras alternan las funciones de ritmo base y repicador, o "hembra y macho". (INC 1978)
El cajón nace de o para la música negra peruana, pero a principios de la década del 50 se incorpora a la marinera, tondero, el golpe-áureo, y se incorpora incipientemente al vals en la década de los 60. Pero es en la década de los 70 en que el cajón se difunde ampliamente entre grupos de folklore negro y gracias a la destacada participación de agrupaciones como el Conjunto Nacional de Folklore, dirigido por Victoria Santa Cruz, y la conocida agrupación "Perú Negro", dirigido por Ronaldo Campos. Más tarde, el cajón brilla como instrumento predilecto y necesario en prácticamente toda manifestación “criolla”, y alcanza su apogeo en las épocas de Arturo Zambo Cavero.
Tradicionalmente, el cajón se hacía de cedro o caoba, y "mientras más antigua la madera, mejor es el sonido", como refiere el eximio cajonero Juan "Cotito" Medrano


Quijada

Es otro instrumento tradicional Afro-Peruano que consiste en el uso del maxilar inferior de un burro, mula o caballo llamada quijada, se golpea haciendo sonar los dientes que se encuentran flojos en sus respectivos alvéolos, los que ofician de resonadores. También se toca con un raspador, que puede ser de hueso, madera, que se frota sobre la fila de dientes. De allí que los nombres de Carraca, carrasca sean voces onomatopéyicas.




Tinya




Otro instrumento antiguo se hace con piel de puma o corderillo. Cuentan que si las pieles han sido robadas el instrumento es más sonoro y más mágico, pero se dice que la tinya de puma sólo la tocan los audaces porque los ayuda a pelear. Su música es imprescindible durante la construcción de casas, fabricación de tejas y adobes, en los carnavales y en la hierra de las vacas (huaca yerrari).

miércoles, 3 de diciembre de 2008

Lectura 2 (Parte III)

Instrumenos de Cuerda


Charango




Instrumento con origen en la vihuela, provisto por lo general de 10 cuerdas distribuidas en cinco órdenes. En el tercero (Mi) las dos cuerdas se octavan dotándolo de un sonido peculiar. En cada región andina ha evolucionado de distinta forma, con lo que existen multitud de variantes y afinaciones. Para la construcción de su caja, se empleaban caparazones de armadillo. En la actualidad proliferan más los hechos en madera ahuecada, aunque también se fabrican de otros materiales y de maderas laminadas a modo de pequeñas guitarrillas. Los virtuosos de este instrumento han hecho posible su reconocimiento y difusión en todo el mundo.

“El charango es para el indígena un medio de comunicación a veces más claro y sincero que la propia palabra”. Charanguista boliviano, Florindo Alvis.


Tiple Colombiano




Instrumento de cuerda típico colombiano con origen en la guitarra española. Está dotado de doce cuerdas metálicas agrupadas en tres grupos. Los dos grupos más agudos llevan la cuerda central octavada que confiere al instrumento un sonido característico muy particular.
Su afinación se correspondería con las cuatro primeras cuerdas de la guitarra, siendo este un instrumento destinado principalmente al punteo de melodías.
Su timbre sonoro tiene cierto paralelismo con el tres cubano y el cuatro puertorriqueño.
Cuatro




El cuatro es una pequeña guitarra con cuatro cuerdas de nylon que junto con el arpa y las maracas se encargan de enriquecer el folklore Venezolano.
Se construye a partir de maderas muy ligeras y su tapa se protege en la zona de golpeo con tiras longitudinales que en ocasiones presentan vistosos coloridos.
Es un instrumento fundamentalmente de acompañamiento pero no por ello simple en su ejecución. Los ritmos Venezolanos están dotados de metrajes ciertamente complejos y en ello radica parte de su belleza que se hace notoria en los Joropos.

Lectura 2 (Parte II)

Intrumentos de viento



Zampoña

Las zampoñas o sikus son flautas andinas fabricadas con caña de carrizo y cuyas notas se distribuyen en dos hileras de tubos. El número de caños en cada atado puede ser variable, aunque lo habitual es de 7 en el más largo (llamado Arka) y 6 en el menor (llamado Ira). Por este motivo, tradicionalmente, los sikus se prestan a ser tocados por parejas de músicos o sikuris, que alternan
notas originando las distintas melodías. En la música folklórica popular son habituales las bandas de sikuris numerosas en músicos. La familia de los sikus es muy extensa y viene marcada principalmente por el tamaño del instrumento. De esta manera partimos del menor que recibe el nombre de Chuli, seguido de las Maltas (Zampoña tipo) y por último las Zankas y los Toyos que siendo los mayores dotan de sonidos mas graves a la orquesta de sikuris.

Antara



Flauta andina consistente en una hilera de caños de carrizo abiertos en uno de sus extremos, dispuestos en orden decreciente y afinados en escala pentatónica (por lo general en "la" o en "mi"). Su limitación en registros unida a la sencillez del instrumento lo dota de sonidos puramente incaicos de honda raíz ancestral y gran belleza.

El número de tubos es variable, generalmente con un mínimo de siete y pocos casos mayor de veinte. Su origen, presumiblemente peruano, data de la época precolombina.

A diferencia de los sikus y por portar todas sus notas en una sola hilera, se ejecuta por un solo músico. Podemos encontrar en Bolivia un instrumento muy similar, el "suri sikuri", que a diferencia de su hermano, incorpora la escala diatónica al igual que los sikus.



Rondador

El rondador es una flauta de tubos de origen incierto, aunque por las características de su afinación, podemos arriesgarnos a decir que es posterior a la llegada de Colón, ya que los incas no conocían la escala cromática ni los intervalos de tercera que es una de las características de esta flauta.
Su afinación, que es lo mas particular de este instrumento, comienza con dos o tres notas que suelen ser el Sol y el La seguidas de una escala pentatónica Do, Re, Fa, Sol y La pero después de cada nota de esta escala va intercalada una tercera menor. Esta peculiaridad hace que tocando dos tubos a la vez produzca un sonido peculiar, que imita al canto de los pájaros.
El número de caños es variable, oscilando por lo general entre 20 a 32.


Quena


Junto con la zampoña, es la flauta andina por excelencia remontándose su existencia a la época precolombina. En sus orígenes era un instrumento pentatónico, ligado con rituales y ceremonias religiosas y se fabricaba en hueso. En la actualidad, ha evolucionado notablemente. Se fabrica en caña o en madera y esta dotada de escala cromática con una amplitud de tres escalas, que la posibilitan para salir airosa ante cualquier tipo de partitura. Su timbre encierra matices ricos en colorido que facilitan el sentimiento interpretativo del quenista. Este hecho se hace latente en las quenas fabricadas en caña, que por su vibración, en ocasiones, parecen llorar.



Tarka



Instrumento de viento boliviano con boquilla y canal de soplo, su longitud va desde los 30 centímetros hasta los casi 60.
Por lo general su forma ortoédrica, suele ornamentarse con un buen número de tallados y pinturas ricas en colorido. Las de menor tamaño reciben el nombre de Anatas.
Tiene 6 orificios en la parte frontal.
Es el instrumento propio del carnaval siendo uno de los mas utilizados en estas fiestas por su sonido voluminoso (por la forma de tocarlo que nunca es “piano”) y alegre.
Las tarkas se tocan en grupos de ellas de distinta afinación con intervalos de cuartas, quintas y octavas lo que hace que tengan ese sonido tan característico.
Las afinaciones más abundantes son las de La, Do y Mi bemol.



Moceño


Flauta andina de tamaño considerable construida en caña (carrizo). Dotada de 5 orificios en su cara anterior, emite sonidos graves al tiempo que dulces. Debido a su longitud, se sopla a través de una caña adosada en paralelo que hace que el aire llegue hasta la boquilla del instrumento. Los ejemplares de menor tamaño, aunque con dificultad, pueden ser soplados directamente en su embocadura. Son estos los que reciben el nombre de "Senka Tankana" que en quitchua significa nariz grande o nariz creciente. Habitualmente sus temas emplean escalas pentatónicas, aunque también hay ejemplares dotados de orificio posterior para enriquecer su escala.



Pinquillos



El pinquillo es genéricamente la flauta de pico en los Andes. Se pensaba, hasta hace poco, que fuera introducido por músicos europeos durante la colonia pero se ha probado su existencia anterior a la conquista. Es un instrumento alegre y se le escucha por todas partes pero en especial en la época de lluvia, en carnavales. Sus parientes más próximos podrían ser los mohoceños y las tarkas. Su nombre viene de Pink'ullu que significa flauta o flautista en Kechwa. Es prácticamente usado sólo en el ámbito rural, en conjuntos grandes para la danza Pinquillada.

Pitos



El Pito es la flauta travesera andina. La encontramos en manos de pastores y en conjuntos festivos para el baile del Chuncho. Existen diversos tipos a lo largo de toda la cordillera, pero especialmente en las zonas selvícolas.



Ocarinas





Es un instrumento cerámico (hecho de arcilla o barro) y se presenta en formas curiosas, elegantes y coloridas. Posee desde 6 a 12 orificios, se toca cubriendo los orificios con los dedos de ambas manos, su sonido imita el sonido de insectos y el canto de los pájaros.



Pututo





Es un instrumento tradicional del Perú y particularmente de las zonas cercanas al Cusco, el pututu fue traído desde la costa. Es considerado como un instrumento muy natural ya que es un caracol de mar muy grande. El pututo fue usado como un instrumento que convocaba reuniones especiales como los cabildos o anunciaba los eventos importantes durante el imperio Inca. Su sonido servia también para dar signos en situaciones de emergencia. El pututero (la persona que ejecuta el pututo) coloca sus labios en la punta del pututo en el cual hay un orificio, soplando con un poco de fuerza produce un vibrante y penetrante sonido. Los pututos deben de tener 50 a 70 años para ser utilizados como instrumento musical.


Wakrapuku



Es un instrumento hecho del cuerno del toro, es el instrumento obligado en las fiestas de toros y en el acompañamiento de las procesiones y también en los carnavales. Este instrumento tiene los mismos principios del pututo. El profesor Gregorio medina Robles opina que este instrumento deriva de los pututos incaicos. Interrumpido el comercio con la costa, los indígenas se habrían ingeniado para fabricarlos con las astas de los toros. De allí también la creencia de que su sonido embravece a los toros.


Lectura 2 (Parte I)

Instrumentos Andinos

Objetivos:

  • Identificar los diferentes instrumentos que son empleados en la música andina.
  • Relacionarse con términos tradicionales empleados para el desarrollo de este tipo de música.
  • Relacionar los instrumentos con las regiones en las que fueron creados.


Instrumentos Andinos


El elemento más característico de la música andina es la instrumentación, que proviene de las culturas aymara y quechua. Los instrumentos de viento (aerófonos) han existido desde antes del imperio incaico, los más famosos son los sikus (aymara), antaras (quechua) o zampoñas (español), están compuestos de 15 o 13 tubos de bambú amarrados en dos hileras, la quena, una flauta vertical de madera con seis orificios.
Los españoles trajeron las cuerdas (cordófonos) como la guitarra, y desde la época colonial se inventaron instrumentos típicos en muchas regiones de América Latina. El más conocido en el mundo andino es el
charango, una guitarra pequeña de diez o doce cuerdas que tradicionalmente se hacía con la concha del quirquincho, nombre aymara del armadillo, y en la percusión, el bombo, un tambor grande tocado con mazas de cuero.

Imagen tomada de: www.inti-illimani.cl


Lectura 1 (Parte II)

Música Andina
La música andina y el empleo de determinados instrumentos responden a la celebración de las fiestas más importantes del ciclo agrícola. Tanto ritmos como instrumentos son usados de acuerdo a los ritos y las épocas de siembra, cosecha y almacenamiento (lluvias y seca). Desde que comenzó la conquista se inició el mestizaje. Así como hubo mestizaje biológico entre los andinos y los europeos, también hubo un rico proceso de mezcla cultural.
Antes de la llegada de los españoles, la cultura y en particular la música se enriquecían a partir de la influencia de pueblos y grupos vecinos con los que entraban en contacto. La cultura siempre fue, es y será dinámica.
Es posible dividir a la música andina en tres grandes categorías, dependiendo del origen y el destino que tenga. Nótese que en muchos casos algunas expresiones musicales pueden pertenecer a más de una categoría. Pero en aras de la simplificación, se puede proponer lo siguiente:
  • Música étnica: es la que algunos llaman "auténtica" música andina y que se escucha principalmente en los lugares donde se genera. Ejemplos de esta música son las danzas tradicionales que por lo general están adscritas a alguna festividad: santiagos, toriles, carnaval de Tinta, llameradas, chonguinadas, y muchas formas de huayno. Antes del advenimiento de la radio y de los discos, prácticamente toda la música andina pertenecía a esta categoría. Es también importante notar que los instrumentos utilizados no tienen que ser tradicionales o pre-colombinos: ya hace mucho tiempo que instrumentos europeos fueron adoptados en los Andes, como el arpa, el violín, la guitarra y, más recientemente, saxofones, trompetas, clarinetes y acordeones. Sin embargo de la presencia de estos instrumentos, las formas musicales de este grupo tienden a adoptar patrones rígidos pegados a la tradición.
  • Música popular: en esta categoría el huayno (ritmo) es el rey. Por razones históricas que tienen que ver con la afluencia de los clientes y la cercanía a la capital, el huayno original de 1950 estuvo dominado por música de Ancash y del centro (valle del Mantaro y, posteriormente, Ayacucho). Con relativa rapidez se fue creando un mercado para esta música, apoyado por la profusión de estaciones locales de radio que pasaban la música que encontraban disponible. Esto hizo posible que se crearan estrellas de la música andina, como el Jilguero del Huascarán, Pastorita Huaracina, y otros. Y también hizo posible algo que es quizá único en el continente americano: la formación de un mercado real y duradero para música con fuerte influencia precolombina (como se sabe, la música mejicana es principalmente de origen español y francés, y la música tropical -afrolatinocaribeñoamericana- es mucho más afrolatina que caribeñoamericana (en el sentido precolombino). Otra consecuencia de este fenómeno fue la difusión de algunas formas musicales étnicas a nivel de todos los Andes, y para consumo no de turistas o intelectuales, sino de la población en general (de ahí la denominación de "popular"). Por eso es posible escuchar música boliviana en Cuenca, y música del Mantaro en Oruro. Formas características de este tipo de música son, además del huayno, el yaraví, el taquirari, la muliza, el huaylas, y en menor medida el sanjuanito, el trote y otras formas. Entre las formas nuevas, la más destacable es la de la música tropical andina, o simplemente música chicha, que es un híbrido sumamente exitoso de ritmos tropicales con tonalidades y temas andinos.

  • Música "cosmopolita" o "internacional": esta categoría abarca la música andina tal como se escucha fuera de los lugares de origen, e incluye a todos los llamados "grupos" musicales que van por el mundo tocando quenas, zampoñas, charangos, guitarras y bombos legüeros. Los grupos originales fueron principalmente chilenos, como Inti Illimani y Quilapayún, y el boom, primero en América Latina, coincidió con el triunfo de la Unidad Popular en Chile. El golpe de Pinochet ayudó a que esta música sobrepasara las fronteras de América Latina y se difundiera por el mundo. Si bien gran parte del repertorio original correspondía a la mal llamada "canción protesta", hoy llamada, igualmente mal, "nueva canción", los fundamentos andinos siempre fueron fácilmente perceptibles. El repertorio de estos grupos incluye algunas piezas casi obligatorias: "El cóndor pasa", "Pájaro chogüí" (no andino propiamente, pero normalmente tocado con quenas, y no con el arpa paraguaya), "Poco a poco", "Canción y huayño", "Vírgenes del sol" y otras. Nótese la diversa genealogía de esta música. Son pocos los grupos que se salen del molde, y tratan de diferenciarse no por el repertorio, sino por el virtuosismo en el manejo de un número cada vez mayor de instrumentos. En los EE.UU. se pueden encontrar con relativa facilidad discos de Rumi Llaqta (que estuvo invitado en St.Paul Sunday Morning de la radio pública el 14 de febrero [de 1993]), Alturas, los Calchaquis, y otros. Con el tiempo, los repertorios se han ido ampliando, y hoy incluyen -en el Perú- música afroperuana, salsa, y otras. Entre los antecesores de estos músicos debe contarse a Ima Súmac y Alejandro Vivanco en los 50 y los 60 y Urubamba (vía Paul Simon) en los 70. Otra vertiente de música andina cosmopolita es mucho más creativa, y se ha empezado a identificar con la música denominada "New Age" en los EE.UU.

lunes, 1 de diciembre de 2008

Lectura 1 (Parte I)


Música Andina
Objetivos:
  • Mostrar el proceso de desarrollo de la música andina y su relación con los ritos de cada cultura.
  • Identificar las diferentes categorías de música andina dependiendo de su origen y destino.

Música Andina

Por su solemnidad evocativa e instrumentación exótica, la llamada música “indígena” de Los Andes tiene un importante público mundial. Hay abundantes grupos que cultivan este género con gran virtuosismo en Colombia, Ecuador, Perú, Bolivia, Chile y Argentina. Esta atención internacional se desarrolló a través de una curiosa historia desde los años 1950.
Durante el siglo XX, las sociedades andinas sufrieron drásticos cambios que influenciaron los desarrollos musicales también. Bolivia, por ejemplo, vivió una revolución nacionalista en 1952 que produjo más reconocimiento de las culturas indígenas que en otros países de la región. El gobierno boliviano fomentó el desarrollo de la música aymara, y las estaciones de radio hicieron famosos a varios grupos típicos del altiplano. Estos trabajos musicales llamaron la atención de algunos movimientos culturales que estaban interesados en el cambio social de izquierda en otros países también. En Chile, por ejemplo, varios miembros de la “Nueva Canción” latinoamericana se interesaron en fomentar e integrar la música aymara en sus trabajos. Esta música se hizo muy famosa con la producción de grupos chilenos universitarios que no eran exactamente indígenas – Illapu, Quilapayún e Inti-Illimani, entre ellos –. Durante las décadas de 1960 y 70, los miembros de estos grupos investigaron la música tradicional de la cultura aymara en el altiplano boliviano, y adaptaron su instrumentación y ritmo para producir creaciones musicales de gran originalidad y fuerza lírica.
Por razones tanto políticas como estéticas, este tipo de música se popularizó rápidamente por América Latina en los años sesenta. Más tarde, cuando estos grupos se exiliaron durante los años setenta para huir de la represión militar de la dictadura de Pinochet, su música también alcanzó gran difusión en Europa. Además,
Simon & Garfunkel hicieron famosa la música andina entre el público norteamericano con la canción “El cóndor pasa” (1970), basada en un arreglo que hizo Jorge Milchberg sobre un tema tradicional de origen incaico que el peruano Daniel Alomía Robles (1871-1942) había incorporado a una suite instrumental en 1913. Paul Simon descubrió esta canción cuando asistió a un concierto de un grupo de música indígena de Los Andes en París.
La complicada historia de “El cóndor pasa”, hoy grabada en infinidad de versiones, muestra el camino laberíntico por el cual la “música andina” llegó a ser un género reconocido en todo el mundo. Es también una buena metáfora de la paradójica historia de las culturas indígenas latinoamericanas: después de siglos de marginalidad, una buena parte del respeto que han obtenido para su autonomía cultural proviene de la atención académica y comercial moderna e internacional. La paradoja es, pues, que estas culturas con frecuencia primero tienen que hacerse 'modernas' y recibir atención internacional para poder luego defender sus derechos y su modo de vida tradicional en sus propios países de origen.
En sus dimensiones folklórica y autóctona, experimenta radicales transformaciones de orden formal y de contenido cuando se inserta en los procesos de producción y difusión masiva en las sociedades contemporáneas. Para ello, concentramos una descripción cualitativa de la música llamada autóctona en la región andina en base a contribuciones de la etnomusicología andina y observaciones propias.
Pese a que pasaron muchos años de tentativas coloniales que sometieron y hasta extinguieron grandes pueblos y culturas, en Perú y Bolivia existen muchas comunidades quechuas y aymaras que conservan sus rasgos culturales con poca influencia de la cultura occidental o con una marcada presencia de estructuras formales y de contenido que tienen que ver con cosmovisiones milenarias.
Muchas comunidades mantienen sus formas de relacionarse con el mundo material, la sociedad, la naturaleza y el mundo sobrenatural y en esas relaciones la música juega un papel fundamental como propiciador de comunicación. Podemos afirmar que una de las principales características de la música andina, también llamada autóctona, es la concepción ritual, es decir su existencia en momentos ritualizados, festivos y religiosos.